Mañana, 14 de febrero, es Miércoles de Ceniza. Este año confluyen en este día importantes acontecimientos en el calendario de muchas personas, en especial de los que celebran San Valentín y de los seguidores del Real Madrid, equipo que juega el partido de ida de los octavos de final de la UEFA Champions League contra el PSG. Quizá esta circunstancia puede afectar a quienes practican el ayuno y la abstinencia para comenzar la Cuaresma. ¿Qué puede hacer hoy un católico enamorado y apasionado del fútbol?
Por ejemplo, el cumplimiento del ayuno puede peligrar si se tiene previsto ir a comer o a cenar en pareja a algún restaurante o en casa. También para aquellos que acostumbran a reunirse para disfrutar de un partido de fútbol en buena compañía en algún local. Pero no todo está perdido, aunque es posible que el tema pueda derivar en alguna conversación interesante con la pareja o con los amigos. Te ofrecemos algunas pistas para vivir este día como nos recomienda la Iglesia:
1-. En primer lugar, discierne qué es lo prioritario para ti: si el comienzo de la Cuaresma, la conmemoración de una fiesta comercial o un acontecimiento deportivo. Ciertamente, para los católicos el Miércoles de Ceniza es uno de los días más señalados en nuestro calendario, en el que estamos llamados a cuidar de manera especial la oración y la penitencia, así como participar en alguna celebración para imponernos la ceniza como signo de conversión. No deben faltar estos momentos en el horario del día.
2-. El Miércoles de Ceniza es un día para celebrar el amor, por supuesto. Un día en el que Cristo nos llama de manera especial al seguimiento, a entregar nuestra vida a quien la entregó por nosotros. Y este amor de Dios se debe celebrar también en pareja. Algo que es extensible a todos los días del año, y no solamente en fechas señaladas. Y una buena comida o cena se puede dejar, sin problema, para más adelante.
3-. El Miércoles de Ceniza no es una jornada para la tristeza, ni para poner rostros cariacontecidos. Es un día serio, con la seriedad que tiene el hecho comenzar un camino de conversión importante de preparación hacia la Pascua. Pero también alegre, ya que Cristo nos dice que esa conversión, de su mano, es posible, y nos llevará a una mayor felicidad. Por tanto, no es incompatible el sentido cristiano con dedicar parte del día a gustos o aficiones, como ver un partido de fútbol.
Conversión, amor y alegría. Tres notas de este día que los católicos estamos llamados a vivir y a contagiar a los demás; empezando, por qué no, por los enamorados y por los apasionados.
¿Qué es ayunar?
Según el Código de Derecho Canónico de 1983, los fieles están obligados a guardar ayuno y abstinencia el Miércoles de Ceniza y el Viernes Santo. El ayuno es obligatorio para las personas de 18 a 59 años, si la salud lo permite. Consiste, según establece la Conferencia Episcopal Española, en no hacer sino una sola comida al día; pero no se prohíbe tomar algo de alimento a la mañana y a la noche, guardando las legítimas costumbres respecto a la cantidad y calidad de los alimentos.La abstinencia de comer carne debe guardarse el Miércoles de Ceniza y todos los viernes de Cuaresma en mayores de 14 años, sin que pueda ser sustituida por ninguna otra práctica.
Manuel Jiménez Carreira, sacerdote. 13 de febrero de 2018