La Hermandad del Buen Fin desarrolla su proyecto de obra social, con su Centro de Estimulación Precoz Cristo del Buen Fin. Debido a la necesidad de atención que existe, esta institución nace con la idea de crear un centro destinado al tratamiento de niños nacidos con discapacidad cuyas familias no dispusieran de medios económicos para acudir al tratamiento privado de estimulación precoz, y ello con la finalidad de propiciar el desarrollo y conseguir la integración social de estos niños que, de otra manera, no podrían recibir el tratamiento por no existir en nuestra ciudad instituciones que lo prestasen de forma gratuita.
El inicio de esta actividad fue hace 35 años con la atención a 3 niños, utilizándose para ello la Sala Capitular de la Hermandad en una tarde a la semana, aplicándose el tratamiento por especialistas miembros de la Hermandad bajo la fórmula del voluntariado, pasando al poco tiempo a unas pequeñas instalaciones destinadas exclusivamente a este fin. Desde su ubicación inicial, y debido a las necesidades que, de forma continuada, lo iban exigiendo, el Centro ha pasado por varias instalaciones hasta llegar a las que ha ocupado durante más de 20 años, ubicadas en la calle Cristo del Buen Fin nº 10 con una superficie de 140 m2. Pero estas instalaciones también llegaron a ser demasiados exiguas para el número de menores que fueron asistiendo, por cuya razón la asociación se planteó la necesidad de buscar una nueva ubicación.
La cesión por parte de la Orden Franciscana, a la que esta Hermandad está vinculada desde su origen, del que fuera Convento de San Antonio de Padua en la calle San Vicente nº 91 de Sevilla, les ofreció la posibilidad de disponer de unas nuevas y amplias instalaciones, habiéndole realizado durante el año 2.017 las obras necesarias para su adaptación a este nuevo uso.
Las actuales instalaciones, fueron inauguradas en septiembre de 2.017, aparte la sala de recepción-espera y 3 aseos, cuentan con 10 Salas destinadas a la Estimulación Precoz, Psicoterapia, Logopedia y Fisioterapia (una de ellas dotada con cámara Gesell), y 1 Sala destinada a Psicomotricidad, estando todas estas Salas dotadas del necesario mobiliario adaptado para los menores tratados, material técnico, inclusión hecha de ordenadores y tablets que, mediante la utilización de programas interactivos especialmente diseñados, captan con mayor intensidad la atención del niño, consiguiendo mejores resultados en el tratamiento. Adicionalmente, se dispone de 1 despacho de Dirección, 1 sala para la realización de trabajos administrativos por las terapeutas y 1 sala de Formación con capacidad para 50 personas. Esta actuación ha supuesto una inversión, entre las obras en el inmueble y el equipamiento, superior a 400.000,00 €
EL Centro atiende a aquellos niños con edad comprendida entre 0 y 6 años, que, con los diagnósticos de encefalopatía, macrocefalia, hipoacusia, síndrome de Down, síndrome de West, retraso psicomotor, espina bífida, autismo, etc., se encuentran dentro del área de la Atención Temprana, que tienen una afectación neurológica, psicomotora o sensorial que determina un retraso madurativo. Y en este curso han ampliado las edades de los niños a tratar, atendiendo a menores que, por haber cumplido la edad de 6 años, han finalizado el ciclo de Atención Temprana pero que, no por ello, dejan de necesitar recibir tratamientos.
Recorrer sus instalaciones alegra el espíritu, decoradas con tanta delicadeza, confort, ternura…, hace pensar y ponerte en la piel de esos padres cuando descubren que allí podrán ayudarlos, podrán darles a sus pequeños lo que necesitan y a ellos, la formación adecuada para poder tratarlos fuera del centro. Hace pensar y preguntar que hay en Sevilla para tratar a estos pequeños; y encuentras que no hay nada, que no hay instituciones públicas que se encarguen de esta tarea indispensable para darles una buena calidad de vida, y a los padres la posibilidad y la tranquilidad de tratar a sus hijos.
La atención profesional y particular que desarrollan se materializa en números que son impresionantes y que, si le pusiésemos cara, aún lo serían más.
El número de menores atendidos se ha ido incrementando de forma continuada hasta alcanzar la magnitud de más de 300 menores los que reciben los tratamientos requeridos para lo cual se imparten en conjunto un total de 24.000 sesiones de tratamiento en el año, gratuitas para las familias, merced al concurso de 17 especialistas titulados en Psicología, Logopedia y Fisioterapia.
Te preguntarás cómo sacan adelante estas cifras, pues con la colaboración de hermanos, donaciones de personas ajenas a la hermandad, entidades, instituciones privadas, además de ayudas y convenios con la Administración Pública, especialmente la Junta de Andalucía, y con cuotas periódicas de socios-protectores; para llegar a tener un presupuesto anual de 360.000€.
Este centro es el premio del Espíritu Santo a una Hermandad que ha dado su vida y su sentido a este proyecto, “escondido” tras los muros del que fue convento y, que seguirá creciendo porque las cosas buenas cuando empiezan son imparables… y es seguro que este trabajo tiene un “Buen Fin”.
María Carmona.