María Carmona Moreno
Huelva (1973)
Casada y madre de una hija
Promotora Sacramental y de Cultos de la Hermandad de la O (Sevilla)
María pertenece a la Parroquia de Ntra. Sra. de La O, de Sevilla donde forma parte del coro parroquial y del equipo de comunicación de la Hermandad de La O, desde donde intenta “aportar un granito de arena para llevar a los hermanos más lejanos de la hermandad el día a día de la archicofradía como medio de evangelización”.
En el seno de la hermandad ha aprendido que lo fundamental para crecer en la fe “es el culto, la formación y la caridad, que son los pilares en los que se sustentan nuestras corporaciones”. Afirma que su vida cristiana tiene fundamento “en la celebración de la Eucaristía dominical, en la que vivo la dimensión de la fe comunitaria insertada en la Iglesia. Además, como hermana de La O participo todos los viernes en la Misa de hermandad y en los cultos que corresponden con los tiempos litúrgicos que celebra la Iglesia que me hacen vivir el día a día del año cristiano. Soy una enamorada de la Vigilia Pascual, cuya luz intento transmitir a todos los que me rodean”.
María destaca la importancia del culto al Santísimo Sacramento “que me acerca al Señor realmente presente en la Eucaristía”.
Esperanza y Vida
“En relación con el segundo pilar: la formación, siempre estoy pendiente de crecer y aprender, asistiendo a las catequesis de familia y charlas que organiza la hermandad. Quiero destacar la formación online que desde hace cuatro años organiza la diputación de formación, que es una buena manera de mantenernos formados y en actualización permanente”. En tercer lugar, María participa también de la Bolsa de Caridad de la hermandad a través del proyecto Esperanza y Vida.
Esta iniciativa de la Hermandad de la O la conforma un equipo de profesionales y voluntarios que pone a disposición de mujeres gestantes en situación de marginación o vulnerabilidad biopsicosocial, los recursos necesarios para favorecer el normal desarrollo del embarazo. «Es un proyecto dirigido a la mujer embarazada en situación de vulnerabilidad y exclusión social, derivada desde Cáritas parroquiales, Bolsas de Caridad de hermandades, Unidades de Trabajo Social u otras entidades sociales en el que se acoge y acompaña».
Manifiesta que no concibe su vida “sin tener siempre entre manos cosas del Señor”. Además, mi colaboración en el equipo de comunicación de la hermandad hace que siempre esté pensando en cómo llevar a los hermanos nuestra fe. Estoy atenta a las necesidades de oración de mis hermanos, peticiones por la salud y necesidades de ellos constantemente”.
El año pasado formó parte del equipo de profesores de español para asistir académicamente a los migrantes acogidos en Tres Barrios, dentro de la pastoral de la Misión Evangelizadora del Gran Poder en Tres Barrios.
“Es una labor muy gratificante porque el trabajo se ve materializado día a día en la progresión de los alumnos y eso hace vivir la realidad de estos hermanos migrantes de cerca. El año pasado fue muy impactante tener dos alumnas de Ucrania, cuando estalló la guerra no podía dejar de pensar en ellas. Se establecen unos lazos de unión curiosos con personas que no tienen nuestra misma religión y que enriquecen mucho. Un día, dando clases, escuché una música desconocida, y era un alumno que tenía en el móvil el rezo musulmán de la tarde”.
