Leía hoy en el Reto de las Dominicas de Lerma un consejo: para poder ver los errores de un dibujo hecho por ti mismo, da la vuelta al dibujo y míralo a trasluz. Esto ocurre porque el cerebro lo reconoce como un dibujo nuevo, ajeno a ti, y no hay que esperar que transcurra un tiempo para descubrir los errores.
Deja que Cristo te muestre tu dibujo
Sigue diciendo más adelante: Cuántas veces no sabemos qué nos pasa, qué nos entristece o qué hacer para que algo se solucione, y pensamos que “el tiempo cura”. Sin embargo, la manera de que puedas vivir tu presente es orar, dejar que Cristo te muestre tu dibujo.
Bajo la mirada de Cristo, cuando te sientas garabato, podrás ver la obra maestra que Él ha creado en ti. Podrás hacer rectas las líneas que han perdido su rumbo, dejando que te dé la mano y te lleve de vuelta; recuperar el color perdido sabiéndote amado, acogido en tu debilidad; y dar color a los que te rodean desde el perdón y la compasión; ante las manchas de tinta que veas, podrás acercarte con Cristo, sin miedo, y dejar que sane las heridas que el tiempo “tapa” pero que Cristo cura. Y es que tu dibujo “imperfecto”, bajo la mirada de Cristo se restaura, se sabe amado, ¡se vuelve nuevo!, y puede seguir caminando cada día de una manera renovada.
La cabaña, el jardín que es la vida
Al leer esto recordaba la escena de la película “La Cabaña” en la que el protagonista está en un jardín que le representa a él, su vida. Andando por el jardín da la impresión de un sitio descuidado, desordenado, con una maraña de plantas y flores dispuestas sin ton ni son. Sin embargo, cuando la cámara sube y muestra una imagen del jardín desde arriba, se ve la perfección, el orden, la belleza. Así es como nos ve Dios. Somos nosotros los que no aceptamos nuestros límites, quienes nos exigimos, y tantas veces eso nos paraliza.
Y vemos desorden y caos en nuestra vida, en nuestro matrimonio, en nuestra familia, en nuestro trabajo… Y pensamos que haría falta un jardinero experto que meta mano, arranque raíces, replante, riegue y cuide.
Cristo es el jardinero experto
Como nos dicen las Dominicas, en la oración, poniéndonos bajo la mirada de Cristo (el jardinero experto), podemos encontrar esa paz que necesitamos y el camino que hemos de seguir. Pero hay veces que nuestra situación de partida es complicada, nos abruma, y no somos capaces de avanzar y ver la salida. En esas ocasiones es aconsejable acudir a alguien que te ayude a ver el dibujo del revés, a descubrir los fallos y enderezar las líneas. La Iglesia de Sevilla ofrece para ello los Centros de Orientación Familiar, donde matrimonios de acogida y profesionales te atenderán gratuitamente en cualquier preocupación relacionada con la familia.
¡No lo dudes! Deja que alguien te dé la mano y te lleve de vuelta, para seguir caminando cada día de una manera renovada.
Información sobre dónde puedes encontrar los COFs.
ESTRELLA LINARES MEDINA
COORDINADORA DE COMUNICACIÓN DE LOS COFS
