La experiencia de Dios vivida por María comienza con la oración, solamente en la oración puede descubrir lo que Dios quiere de ella.
V. Reina del Cielo, alégrate, aleluya.
R. Porque el Señor, a quien has llevado en tu vientre, aleluya.
V. Ha resucitado según su palabra, aleluya.
R. Ruega al Señor por nosotros, aleluya.
V. Goza y alégrate Virgen María, aleluya.
R. Porque en verdad ha resucitado el Señor, aleluya.
Oración: Oh Dios, que por la resurrección de Tu Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, has llenado el mundo de alegría, concédenos, por intercesión de su Madre, la Virgen María, llegar a los gozos eternos. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amen.
Imagen: Ntra. Sra del Subterráneo. Hermandad de la Cena