Cuatro casas llegaron a tener en Sevilla las Franciscanas Concepcionistas. Esta de Santa María del Socorro localizada entre las calles Socorro y Bustos Tavera y otras tres desaparecidas en las calles San Miguel, Vírgenes y San Juan de la Palma.
Dentro de la observancia franciscana en España, Cisneros favoreció a la Orden de la Purísima Concepción fundada en Toledo en 1489 por Santa Beatriz de Silva, dama de compañía de la reina Isabel la Católica, nacida de padres portugueses, según unos en Ceuta que por entonces pertenecía a Portugal o según estudios recientes en Campo Mayor, en el Alto Alentejo. No se debe considerar a esta orden como una rama de las clarisas ya que sus orígenes están ligados a la regla de San Benito y a la orden del Císter. A partir de 1511, Julio II aprueba su nueva regla y se consolida como una orden autónoma, aun cuando en ella se haga mención expresa de San Francisco.
Se ubica este monasterio en la parroquia de San Román dando su iglesia a la calle Socorro y el torno, locutorios y hospedería a Bustos Tavera. Su fundación data de 1522 por doña Juana de Ayala, sobrina del cardenal Cervantes, en unas casas de su propiedad en la entonces denominada calle de los Melgarejos. Las primeras monjas provenían del monasterio cisterciense de Santa Marías de las Dueñas y del jerónimo de Santa Paula, ambos próximos a la nueva fundación, quedando fijado en veinte el número de monjas. La zona del monasterio que da a Bustos Tavera es de factura moderna obra de los arquitectos Espiau y Tascó, fechada en 1970; funcionó como residencia de estudiantes hasta 1996 en que las monjas se vieron obligadas a cerrarla por la imposibilidad de atenderla. Recientemente se ha vuelto a abrir en estas dependencias una hospedería externa con la idea de ayudar al sostenimiento del monasterio y la comunidad. Gestionada por personas de su confianza, se intenta aprovechar el céntrico emplazamiento así como el interés turístico-artístico de la zona, ofreciendo un ambiente de sencillez y silencio monásticos.
La comunidad está compuesta por cinco monjas, todas españolas, que inician su jornada antes de las siete de la mañana con la oración de laudes y la concluyen pasadas las diez y media de la noche con el rezo de completas. Durante el día se dedican a labores domésticas, así como al trabajo en la huerta. Debido a lo pocas que son y a las muchas necesidades de atender a las mayores, actualmente solo elaboran dulces en determinadas fechas como por ejemplo en Navidad.
La falta de vocaciones afecta a todas las comunidades contemplativas tanto masculinas como femeninas, sea de la orden que sea, con la sorprendente excepción de las antiguas clarisas de Lerma ahora integradas en un nuevo instituto denominado Iesu Communio. En Santa María del Socorro, la sevillana Sor Inmaculada, nacida a pocos metros del monasterio, y la cacereña Sor Elena contribuyen con su vitalidad a mantener viva la llama del carisma de Santa Beatriz de Silva en un mundo que parece remar en otra dirección y que no facilita la llegada de vocaciones por el desconocimiento de lo que es la vida contemplativa. Sean muchas o pocas, son las que Dios quiere, las elegidas.
Ismael Yebra
CONTACTO
Dirección: Bustos Tavera, 30. 41003. Sevilla.
Teléfono: 954 50 27 23
Eucaristía: De lunes a viernes a las 8.30 h. Sábados, domingos y festivos a las 9h.
Horario de torno: Laborables de 10 a 13.30 y de 17 a 19 h.