Oh Rey de las naciones y deseado de los pueblos, piedra angular de la Iglesia, que haces de dos pueblos
Angelus
Oh Emmanuel, rey y legislador nuestro, esperanza de las naciones y salvador de los pueblos, ¡ven a salvarnos, Señor Dios
Oh Sol que naces de lo alto, resplandor de la luz eterna, sol de justicia, ¡ven ahora a iluminar a
Oh llave de David y cetro de la casa de Israel, que abres y nadie puede cerrar, cierras y nadie
Oh Sabiduría, que brotaste de los labios del Altísimo, abarcando del uno al otro confín y ordenándolo todo con
Oh, Pastor de la casa de Israel, que en el Sinaí diste a Moisés tu Ley, ven y líbranos con
Oh, Sabiduría del Altísimo, que lo ordenas todo con firmeza y suavidad, ven y muéstranos el camino de la prudencia.
El Señor viene con esplendor a visitar a su pueblo con la paz y comunicarle la vida eterna. V. El
El dolor propio y ajeno habita en corazón de Madre de la Virgen María, sea Ella nuestro ejemplo y modelo.
El Señor llega, salid a su encuentro; él es el Príncipe de la paz. V. El Ángel del Señor anunció