Hornachuelos, Córdoba (1961)
Feligresa de la Parroquia Santa María de la Asunción de Mairena del Alcor
Presidenta de la Unión Eucarística Reparadora de Sevilla
Consuelo es la presidenta de la Unión Eucarística Reparadora (UNER) de la Archidiócesis de Sevilla desde el 2006. “Esta vocación la conocí con las hermanas Misioneras Eucarísticas de Nazaret, que venían a mi parroquia a impartir formación eucarística”. Es esposa, madre y abuela. “Mis pilares de la fe son Jesucristo vivo en la Eucaristía y la Santísima Virgen”. Sobre la vivencia de su fe afirma que intenta tener presente siempre a Jesús y a su madre del Cielo para poder llevarlos a los demás. “Como regla de vida, este año procuro que todas las personas que me rodean se encuentren con Jesús, por eso, me pregunto siempre ante cada acontecimiento ¿Si esta persona fuera Jesús mismo, cómo la trataría? Eso me ayuda a vivir más en su presencia diariamente”.
Sobre la UNER, Consuelo explica que es una rama laical de la congregación de las Misioneras Eucarísticas de Nazaret. “La componemos las mujeres, que nos llamamos Marías del Sagrario, y los hombres, discípulos de San Juan. También forman parte los niños y jóvenes eucarísticos reparadores y una rama de mujeres solteras o viudas que se quieren consagrar y son llamadas las Misioneras Seglares de Nazaret. Todos los perfiles viven el carisma de san Manuel González, conocido como el obispo de los sagrarios abandonados”.
Las Marías del Sagrario viven de Cristo Eucaristía. “Tengo el propósito de ir a misa cada día para vivir del alimento del Cielo y, además, tengo días dedicados para estar con el Señor ante el sagrario , concretamente los martes y jueves, con unas horas fijas”. Consuelo pertenece también, junto a su esposo Antonio, al movimiento de los Equipos de Nuestra Señora.
Carisma de las Marías del Sagrario
Para vincularse al carisma de acompañamiento al Señor Jesús en el sagrario, lo primero es “amarlo profundamente, procurarle compañía y que te duela su abandono. Tienes que formarte y conocer ese abandono que solo a través del trato con Jesús experimentas. Él está vivo en el sagrario por amor a ti y nosotros los hombres somos desagradecidos a tanto amor”.
Las Misioneras Eucarísticas de Nazaret acuden a las parroquias que lo deseen formando a las personas que quieran escuchar hablar de este carisma. “También organizamos peregrinaciones eucarísticas donde visitamos sitios religiosos y damos a conocer esta forma de hacer presente al Señor a las personas que viajan con nosotros por esos caminos de la vida. Nos decía san Manuel que encontraremos pobres hombres y hombres pobres, por ese motivo vivimos la caridad con los más necesitados; porque tan pobre es el que no tiene qué comer como el que no tiene a Jesús en su vida”, subraya.
Adoración eucarística
En relación a los encuentros eucarísticos, las Marías del Sagrario de la Parroquia la Asunción del Señor se reúnen para recibir formación una vez al mes, y todos los jueves del año organizan una exposición del Señor a las seis y media de la tarde, rezan vísperas, reflexionan sobre los padres de la Iglesia y leen textos de san Manuel González.
Consuelo, como catequista de post confirmación ha experimentado la importancia de suscitar en el corazón de los niños y jóvenes, “no el cumplimiento, sino la necesidad de adorar y amar al Señor Jesús en el sagrario. Esa hambre espiritual se va logrando teniendo cercanía e intimidad con el Señor frente al sagrario. Todas las etapas de catequesis deben pasar por el sagrario. Hay muchísimo que hacer, muchísimo. Los niños deben pasar frente al Señor expuesto y saber que está allí, hay que educarlos y enseñarlos con amor”, añade. Como María del Sagrario acentúa la importancia de la vida contemplativa y la acción de gracias después de recibir la Eucaristía, “hay que cuidar los detalles con el Señor”.