La tradición monástica de Écija es de las más antiguas de España. Santa Florentina, hermana de San Leandro, San Isidoro y San Fulgencio, que fue obispo de Écija, habitó un monasterio de esta localidad para cuya comunidad San Leandro redactó una Regla para Vírgenes que pasa por ser de las más antiguas de la península ibérica antes de la introducción de la de San Benito. La familia procedía de Cartagena y se instaló en Sevilla en el siglo VI. El primitivo convento de San José del Valle situado cerca de Écija permaneció habitado hasta la invasión musulmana.
La fundación de este convento tuvo por objeto rememorar el primitivo monasterio bajo la advocación de Santa Florentina y se remonta a 1388 por lo que está considerado como el más antiguo de Écija y una de las primeras fundaciones de la orden domínica en Andalucía.
En principio fue una comunidad de beatas que en 1460 se adscribió a la rama femenina de la Orden de Predicadores. La llegada al convento de mujeres pertenecientes a familias importantes de Écija permitió a la comunidad gozar de numerosos medios económicos en forma de donaciones y legados.
Santa Florentina
La fábrica del convento obedece a reformas y ampliaciones que pertenecen fundamentalmente a los siglos XVII y XVIII.
La bella portada de la iglesia está fechada en 1759 y el retablo mayor en 1714, relacionado con el entorno de Cristóbal de Guadix, alberga en el centro una imagen de Santa Florentina y en las calles laterales otras atribuidas a Pedro Roldán.
La iglesia es de una sola nave con cúpula de media naranja en el presbiterio y en los muros laterales destacan una imagen de la Virgen del Rosario y otra de Santo Domingo. Al torno y locutorios se accede a través de una portada de arco apuntado a cuyo lado se encuentra una bella hornacina dedicada a San Martín de Porres.
Paz interior en clausura
La Madre, Sor Gloria, es una ecijana que lleva 53 años en el convento. Me llama la atención por su acento y sentido del humor típicamente ecijanos que, sin duda, son fruto de esa felicidad que muestran las personas que han encontrado la paz interior dentro de una clausura. Eso se transmite y Sor Gloria irradia fe y espíritu contemplativo.
En total son siete, Sor Matilde de Granada, Sor Consuelo de Sanlúcar de Barrameda, Sor Pilar de Écija, Sor Visitación procedente del convento cerrado de Arahal y dos de Santo Domingo, Sor Jacoba y Sor Ada Iris.
Espíritu de Santo Domingo
La repostería ocupa las horas de labor necesarias para la subsistencia. Los bizcochos marroquíes, una clásica especialidad ecijana que elaboran con su fórmula original, son la especialidad más demandada. También elaboran tortas de almendra, magdalenas, bizcochos de coco y cajas surtidas que se pueden adquirir a través del torno o realizando un pedido que llegará al día siguiente. Dejaron de hacer labores de costura, aunque sí hacen purificadores y corporales por encargo.
El espíritu de Santo Domingo está presente en este convento que une el carisma dominicano a la tradición del monacato cristiano primitivo encarnado en la figura de Santa Florentina. Me he sentido acogido de una forma especial al acercarme a esta comunidad que, no me cabe duda, seguirá dando frutos espirituales al tiempo que nos endulza la vida.
Ismael Yebra
CONVENTO DE SANTA FLORENTINA
Dirección y Contacto:
C/. Santa Florentina, 12
Écija. Sevilla.
Teléfono: 954 83 11 99
E.mail: comunidaddominica@ecija.org
Horario de torno:
Laborables, de 9.15 a 13.30 y de 16.30 a 18.45
Festivos, de 10.30 a 13.30 y de 16.30 a 18.45