Cada 30 de enero se celebra el Día escolar de la no-violencia y la paz. La educación en y para la tolerancia, la solidaridad, la concordia, el respeto a los Derechos Humanos, la no-violencia y la paz son los motivos fundamentales en torno a los que gira esta celebración que se ha convertido en un hito importante en el calendario escolar. En el Día de la Paz, los centros educativos se comprometen como defensores de la paz y entendimiento entre personas de distinta procedencia y modos de pensar.
Se eligió ese día por ser el aniversario de la muerte del Mahatma Gandhi (India, 1869-1948), líder pacifista que defendió y promovió la no violencia y la resistencia pacífica frente a la injusticia y que fue asesinado por defender estas ideas. Según Unicef, una educación inspirada en una cultura de no violencia y paz permite al alumnado adquirir conocimientos, actitudes y competencias que refuercen su desarrollo como ciudadanos globales críticos y comprometidos con sus derechos y los de otras personas.
La Delegación de Justicia y Paz de nuestra diócesis anima a los niños y a las niñas ha convertirse en «Agentes para la paz» recordándonos que «Bienaventurados quienes se preocupan del bien común».
«La buena política está al servicio de la paz» es el lema que el papa Francisco escribió el pasado 1 de enero con motivo del Día Mundial de la Paz. En este documento adjunto (descarga Día escolar de la No Violencia y la Paz 2019) extraen lo más importante del mensaje y nos ofrecen además de un cómic sobre el tema, una serie de propuestas para trabajar en la escuela:
- Para los más pequeños, trabajar la empatía poniéndonos en su lugar.
- Para los medianos, aprender la defensa de la naturaleza y de la paz.
- Para los mayores, convertirlos en agentes de la paz: alumnos, ciudadanos y políticos.