Francisco y Rocío son los padres de Curro (13 años), Manuel (10) y Rocío (6), fruto de 14 años de matrimonio. Ambos pertenecen a la Parroquia Nuestra Señora de Valme y Beato Marcelo Spínola, de La Motilla, (Dos Hermanas), y están muy unidos también a la de Santa María Magdalena, de la misma localidad, “que es nuestra parroquia de bautismo”.
Este matrimonio pertenece al Proyecto Amor Conyugal, que tiene sus comienzos en agosto de 2002. «Se trata de un método para matrimonios que se ha hecho diocesano en Málaga y se está extendiendo por multitud de diócesis, con la supervisión de los párrocos respectivos, los delegados de Pastoral Familiar y los obispos de cada diócesis». Está basado en las catequesis de San Juan Pablo II sobre el amor humano y consiste en trabajar sobre tres pilares (fe, formación y vida) para recuperar el plan de Dios para el matrimonio y la familia.
Sobre los pilares de su fe, Francisco y Rocío destacan cuatro: familia, oración, formación y acción social. “Desde muy pequeños hemos tenido la inmensa suerte de que nuestras familias han ido poniendo las bases de nuestra fe, sustentándola en estos principios”.
En este sentido, procuran que su día a día sea contemplado y vivido desde el prisma de la fe. “Con actitud de gratitud por tantos dones recibidos y de servicio a los demás. La fe la asumimos como parte fundamental de nuestra forma de ser, actuar y vivir en nuestra familia, en nuestro trabajo y entorno”, afirman.
Espiritualidad conyugal
En relación a la oración conyugal, expresan que su importancia radica “en que en ella y de ella nace la fuerza necesaria para afrontar el día a día y para ser imagen de Dios en el mundo. Sin ella, no somos nada”.
Apostar por una relación donde Cristo sea el centro es prioridad para este matrimonio, “porque es en Él y con Él donde radica la razón de ser de nuestra vida. El amor como centro de nuestra vida”, sostienen.
En esta línea, “la entrega, confianza, generosidad sin medida, amor sin límites, comunión y santidad desde la perspectiva cristiana, es la mejor razón para apostar por un matrimonio como Dios lo pensó”, destacan.
Centro de Orientación Familiar
Hace once años iniciaron la andadura en los Centros de Orientación Familiar (COF), recorrido que ha marcado positivamente su vida y la de su familia. Actualmente son los directores del COF de Dos Hermanas.
Francisco y Rocío han participado en la Escuela Diocesana de Familia y Vida y en el Máster de Pastoral Familiar del Instituto Juan Pablo II.
“La formación, vivencias y experiencias vividas han dado una nueva dimensión a nuestra familia. Y todo eso unido a la oportunidad de poder ayudar a tantas personas desde el amor y la fe. Alguien nos dijo una vez, amad mucho. Amaos y amad mucho. Porque el amor, cuando es sincero, desborda y llega a los demás como la mejor forma de ser felices”, aconsejan.
Finalmente, valoran positivamente la labor que ejercen los medios de comunicación social al servicio de la Iglesia, “por ser una oportunidad de asomarnos a esta ventana desde la que poder salir al encuentro de los demás para ofrecerle nuestras manos y nuestro esfuerzo, porque estamos aquí para servir y ayudar y qué mejor forma de alcanzar la felicidad que de esta manera”.
Rocío Bando Pastor. Dos Hermanas (1979)
Francisco de Paula Muriel-Rivas. Sevilla (1977)
Directores del COF Dos Hermanas, miembros de Proyecto Amor Conyugal, padres de tres hijos