¿Dónde verla?: Movistar+ (suscripción), Amazon Prime Video (alquiler)
Hay películas que exigen una particular complicidad por parte del espectador, que ha de estar dispuesto a aceptar las peculiares claves que le propone el argumento para poder disfrutarlas. “El gran Maurice”, estrenada en España a finales de 2022, es una de ellas. Porque, a pesar de estar inspirada en una curiosa historia real, el decidido tono de comedia, la inclusión de varias escenas oníricas, los momentos surrealistas y ciertos sucesos que rozan lo inverosímil, podrían confundir al público sobre la seriedad de los temas que se tratan. Sin embargo, es una cinta con muchas pequeñas virtudes que en el balance final se gana el título de encantadora.
El filme sigue la biografía de Maurice Flitcroft (Mark Rylance), un modesto operador de grúa en los astilleros de Barrow-in-Furness, Inglaterra. Casado con Jean (Sally Hawkins), madre soltera de Mike, y padre de dos gemelos aficionados al baile disco, Maurice acaba participando en el prestigioso Open Británico de golf. Pero no piense el lector en el típico largometraje deportivo de superación ni mucho menos, porque la trayectoria de Maurice es tan sorprendente que tiene un punto de grotesca. De hecho, fue el jugador del Open Británico con peor puntuación histórica.
La cosa no acaba ahí, con la noticia del fracaso de Maurice, porque el resto de la narración depara muchas más sorpresas y emociones que dejamos en la reserva. En cualquier caso, vale la pena apuntar que “El gran Maurice” es sobre todo una película sobre la familia, el matrimonio, la paternidad, los sueños y las esperanzas. Entre bromas y veras apuesta siempre por un sano optimismo con reminiscencias de Fran Capra, tan poco frecuente en la cartelera actual.
La dirección de Craig Roberts se ajusta a los cánones de las producciones británicas de corte social, donde adquieren relevancia las precarias condiciones laborales, la modestia de las viviendas y las dificultades para sacar una familia adelante. Mark Rylance y Sally Hawkins, ambos ganadores de un Oscar, vuelven a demostrar que son unos grandísimos actores, sin desmerecer al resto de un reparto menos conocido pero solvente.
“El gran Maurice” es una cinta muy humana, idealista quizá, que anima a tener metas altas, a mirar a las estrellas, como le gusta repetir al protagonista. Y también a perseverar en el esfuerzo porque, afirma Maurice, “la práctica lleva a la perfección. Y si no lo conseguimos, siempre podremos decir que lo hemos intentado”.
Juan Jesús de Cózar