El oro verde (Edouard Bergeon, 2024) es un thriller medioambiental que aborda la cuestión de la deforestación en Indonesia para la producción del aceite de palma y las consecuencias nefastas para sus lugareños. Se trata de un tema ecológico en el que se entremezclan los intereses tanto de las grandes corporaciones como de las relaciones internacionales.
Carole (Alexandra Lamy) lucha por salvar a su hijo Martin (Félix Moati), injustamente condenado a muerte en Indonesia bajo acusaciones de narcotráfico al tratar de destapar todo este oscuro entramado. En su búsqueda por la verdad y la justicia, Lamy evoluciona desde una mujer aterrorizada por perder a su hijo a una guerrera dispuesta a desafiar a los más poderosos.
La narración se mueve entre el drama íntimo experimentado por Carole y Martin y la denuncia de problemáticas locales con implicaciones globales. El guion va desenmascarando a los responsables que perpetran estos abusos de poder, desde los lobbies que obstruyen la justicia hasta los gobiernos que no solo son permisivos sino también cómplices. El conflicto es representado con crudeza, de manera que la película se convierte en un vehículo para denunciar los crímenes ambientales y las depravaciones cometidas contra los pueblos dentro de un sistema que parece diseñado para perjudicar siempre a los más vulnerables.
La fotografía del film está al servicio de este mensaje. Abundan los amplios planos de la selva tropical devastada por la deforestación. A través de estos paisajes, Bergeon enfatiza la pequeñez de Martin, de Carole, de las poblaciones autóctonas que desean sobrevivir, frente a la inmensidad de las corporaciones y entidades políticas a las que se resisten.
Desde el punto de vista ético, la película indaga en los límites hasta los que estamos dispuestos a llegar cuando nos enfrentamos directamente a sistemas corruptos. Carole y Martin encarnan esta lucha ética y moral, retando al espectador a cuestionarse sobre el valor de la justicia y el precio del silencio. Además, el argumento interpela directamente al papel de la comunidad internacional, evidenciando la inconsistencia de su compromiso con los derechos humanos y la preservación del medio ambiente ante la presión constante de intereses políticos y económicos.
El oro verde, por tanto, es una propuesta audaz con un discurso sólido. Nos encontramos ante un thriller que no solo examina el drama familiar de los protagonistas o el de la pequeña comunidad indonesia retratada, sino también la deshumanización y explotación propias de un orden mundial como el actual. Es una historia que puede ser utilizada para reflexionar y dialogar.
Larissa I. López (Pantalla 90)