La Fundación Gracia y Paz es un proyecto de laicos católicos para la atención integral de los mayores más desfavorecidos
Un grupo de laicos católicos de Sevilla y su provincia, preocupados la situación en que vivían algunos mayores faltos de recursos y en su caso, de familia, se sintieron empujados a concretar su compromiso cristiano en este ámbito. Y, a iniciativa del laico Francisco Campos Aguas, constituyeron la Asociación Gracia y Paz en la parroquia de San Joaquín de Sevilla, siendo su Párroco en aquel entonces Francisco Javier Pérez Mantero. Estamos a final de la década de los 80. La asociación creció gracias a los fieles que se sumaron a este proyecto. Iban a visitar a los ancianos en sus domicilios, les organizaban actividades, los aseaban, estaban con ellos y consolaban en su caso…Más adelante consiguieron casas para atenderlos
Cuando la Administración emitió el marco legal al que debía ajustarse la atención a personas mayores, la Asociación tuvo que plantearse su situación, ya que todos los que trabajaban eran personas voluntarias que hacían algo por los mayores, pero no eran profesionales. Y las casas eran casas, pero no residencias. Para seguir con el proyecto y convencidos de que si Dios quería saldrían hacia adelante, constituyeron la Fundación Gracia y Paz (fundación sin ánimo de lucro) para la gestión material de la atención a los ancianos. Y la Asociación Gracia y Paz se reservó la misión de animación y atención espiritual de los ancianos.
En la actualidad, son tres las residencias repartidas por la Archidiócesis las que gestiona. Se atienden a unos 90 ancianos y se han creado unos 60 puestos de trabajo. El personal de las mismas se esfuerza por imprimir el carácter propio de la Asociación a la vida en las residencias. Junto con los miembros de la Asociación Gracia y Paz se coordinan con la Pastoral de la Salud de sus respectivas parroquias para que no falte a los mayores la debida atención espiritual.
La Fundación ha pasado por momentos críticos y ha visto peligrar la continuidad del proyecto, ya que su prioridad siempre ha sido el bienestar integral de los ancianos. Pero el Señor, de un modo u otro, siempre la ha sacado a flote. En la actualidad, los miembros de la Asociación y de la Fundación Gracia y Paz buscan relevo generacional que dé continuidad a esta obra.
Si te sientes llamado a concretar su compromiso cristiano en la atención a los ancianos, puedes ponerte en contacto con ellos.
¿Cómo colaborar con la Fundación Gracia y Paz?
Cualquier particular o empresa que se sienta afín a estos principios y valores puede colaborar:
- Con su tiempo y esfuerzo
- Con su aportación económica
Para colaborar tanto personalmente como económicamente puede ponerse en contacto por e-mail o por teléfono. Para empresas que deseen colaborar económicamente en calidad de mecenas, la Fundación está inscrita dentro del ámbito de la ley 49/2002 y declarada de utilidad pública por lo que cualquier aportación económica (donación) en favor de la Fundación o sus Residencias podrá ser deducible del IRPF o Impuesto de Sociedades.