Sínodo de los Obispos: por y para el pueblo de Dios
Este miércoles 3 de octubre fue un día grande para los jóvenes católicos porque comenzó la XV Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, que en esta edición versará sobre los ‘Jóvenes, Fe y Discernimiento Vocacional’.
Con motivo de esta asamblea, el Papa Francisco publicó el pasado 15 de septiembre la Constitución Apostólica Episcopalis Communio en la que resaltó como una de sus características principales `la consulta al Pueblo de Dios y una Iglesia sinodal en la que el ejercicio del primado petrino podrá también recibir mayor luz´.
El Papa recordó como la institución fue decidida por Pablo VI el 15 de septiembre de 1965 y cómo esta sigue siendo ´uno de los legados más preciosos del Concilio Vaticano II´, Francisco subraya además la «colaboración efectiva» del Sínodo de los Obispos con el Romano Pontífice en asuntos de mayor importancia, aquellos que «requieren especial ciencia y prudencia para el bien de toda la Iglesia».
El objetivo del sínodo es que su desarrollo pueda ´contribuir, al restablecimiento de la unidad entre todos los cristianos, según la voluntad del Señor´. De este modo, ayudará a la Iglesia, según el deseo de San Juan Pablo II expresado en la encíclica Ut unum sint, a «encontrar una forma de ejercicio del primado que, sin renunciar en modo alguno a lo esencial de su misión, se abra a una nueva situación”.
Actualmente la acción sinodal cobra importancia ante cuestiones que requieren una acción oportuna y concertada de los pastores de la Iglesia, pues recientemente ha crecido el deseo de que el Sínodo se convierta en ´una manifestación particular y una realización eficaz de la preocupación del episcopado por todas las Iglesias´, teniendo en cuenta que todos los pastores están formados ´para el servicio al Pueblo de Dios, al que ellos mismos pertenecen en virtud del sacramento del Bautismo´.
https://www.vaticannews.va/es/papa/news/2018-09/papa-jovenes-de-grenoble-audiencia-sigan-a-jesus-iglesia.html