“El tamaño es poco más de un dedo, más parece que está en Ella el de Dios”
( Fray Juan Álvarez de Sepúlveda)
A finales del mes de mayo, (este año excepcionalmente. el primer domingo de junio) se celebra en la localidad de Villaverde del Río la Romería en honor de la Virgen de Aguas Santa o como es conocida popularmente la Romería del Convento.
La Virgen de Aguas Santa, Patrona de Villaverde del Río, es una imagen de tan solo 11 centímetros de altura realizada en terracota fina y tamizada, estofada y policromada. Los diferentes estudios sitúan la fecha de su realización entre la segunda mitad del siglo XIII y la primera del XIV, es decir, en el gótico medio. Esta imagen de la Virgen es reconocida por los expertos como una interesantísima representación de la Madre de Dios, tanto por su antigüedad e historia como por su reducido tamaño, su hechura y conservación.
Según la leyenda, la imagen de la Virgen de Aguas Santa era propiedad de San Leandro, quien se la regaló a su hermano San Isidoro.
Desde entonces fue venerada en la Iglesia Mayor de Sevilla, hasta que, con motivo de la invasión musulmana, la ocultaron unos devotos en las faldas de Sierra Morena ante el temor de que fuese profanada y destruida.
Una vez reconquistado el Reino de Sevilla por los cristianos, se manifestó milagrosamente en el lugar de su ocultación, término de Villaverde del Río, apareciéndose a un pastor del lugar, llamado Juan Bueno. Estando el pastor durmiendo la siesta, en una época de gran sequía, sueña con manantiales y ríos caudalosos cuando lo despierta el ruido de agua. Sorprendido ve como una caudalosa fuente había brotado de una peña y su rebaño bebía de ella. Se acerca él también a beber y descubre una imagen que había surgido con la fuente, era la Virgen de Aguas Santa.
Una vez comprobado el testimonio del pastor, el arzobispo manda edificar en ese lugar una ermita donde sea venerada esta imagen de la Virgen, que desde entonces es llamada Aguas Santa.
En 1594 fueron entregadas a la orden franciscana la Imagen de la Virgen y su ermita. Por lo que la ermita se convirtió en provisional convento. De ahí que a esta romería se la conozca popularmente como la Romería del Convento. Este convento estuvo abierto hasta el año 1835 en que las órdenes religiosas fueron exclaustradas y sus bienes desamortizados.
Fue el domingo 31 de enero del año siguiente, cuando con autorización del arzobispado de Sevilla, la imagen es trasladada a la Parroquia de la Purísima Concepción de Villaverde del Río donde desde entonces ha tenido altar propio. En 1907, el artista local Antonio Torres Sarmiento realiza una copia de la Virgen para ser venerada en la ermita del Convento.
Por iniciativa popular, alrededor del año 1.500 empiezan a celebrarse las romerías alrededor de la ermita y el convento. La romería se ha conservado prácticamente hasta la actualidad, con todas las variaciones que han ido marcando los tiempos, hasta convertirse en una de las manifestaciones más importante de la comarca. Prueba de ello es que alrededor de la ermita se montan cada año unas 160 casetas, donde la gran hospitalidad de su gente hacen sentir uno más entre ellos.
El día de la romería, la ermita amanece engalanada y todo es colorido y emoción porque ha llegado el día más grande para los vecinos de Villaverde, junto con la noche del 8 de septiembre, festividad de su Patrona.
El día comienza con la salida de la carreta del Simpecado hacia la ermita, rodeada de multitud de fieles, a las 9:00 horas. Una vez que llega a la ermita, sobre el mediodía, tras recorrer los 3 kilometros que separa el pueblo de la ermita, se celebra la tradicional “Misa del Convento” y terminada ésta comienza el día de convivencia alrededor de la ermita, en la que no falta el cante y el baile. A las ocho de la tarde el Simpecado es colocado de nuevo en la carreta y comienza el camino de regreso al pueblo, a lo largo del cual se reza el Santo Rosario, se canta y baila delante del Simpecado, ante el cual todos los caballistas saludan.
Merece la pena conocer y vivir esta romería que está considerada entre las dos romerías más antiguas de Andalucía. Merece la pena por el gran espíritu de acogida de su gente, por la belleza del paraje donde se sitúa la ermita y, sobre todo, porque la pequeñez y sencillez de esta Virgen de Aguas Santa hará que se cuele rápidamente en el corazón de todo aquel que se postre ante Ella.
Aguas Santa Morales Torres, la pregonera de este año, invita en su pregón de la Romería Misa del Covento a que: “ Hagamos un compromiso, un compromiso serio, que nuestra vida sea de entrega hacia los hermanos. Un compartir constante, un ejemplo de alegría, de amor y fraternidad, intentemos día a día que todos estén contentos. ¡ Hagamos que siempre sea como el día del Convento!”.
Mari Carmen Hernández.