¿Dónde verla?: Amazon Prime Video, Rakuten TV
Que Steven Spielberg es uno de los mejores cineastas de la historia del cine nadie lo duda. Así lo atestiguan su prolífica filmografía y los numerosos reconocimientos internacionales recibidos, desde que en 1971 dirigiera su primer largometraje: “El diablo sobre ruedas”. Es cierto que algunas de sus películas no lograron buenas críticas ni fueron éxitos taquilla, pero cada estreno de Spielberg continúa siendo un acontecimiento y bastaría citar tres títulos para rendirse ante su maestría: “E.T., el extraterrestre” (1982), “La lista de Schlinder” (1993) y “Salvar al soldado Ryan” (1998).
Uno de sus trabajos más simpáticos, fiel a las constantes de su cine y dirigido a un amplio abanico de espectadores, lo filmó Spielberg hace 20 años. Se titula “La terminal” y recaudó 220 millones en taquilla, que compensaron ampliamente los 60 de presupuesto. El argumento, que tiene aires de fábula y aroma ‘capriano’, se inspira remotamente en un hecho verídico ocurrido a Mehran Karimi Nasseri, un refugiado iraní que vivió en la terminal uno del aeropuerto Charles de Gaulle de París desde el 8 de agosto de 1988 hasta julio de 2006. Increíble pero cierta, su historia no cabe en estas líneas y remitimos a Internet.
En el caso de “La terminal”, el protagonista es Viktor Navorski (Tom Hanks), que viaja a Nueva York desde el ficticio país de Krakozhia para cumplir un deseo relacionado con su padre. Un repentino golpe de estado en Krakozhia impide a Viktor salir legalmente de la terminal. A pesar de su evidente bondad, no consigue superar el bucle burocrático en que se ve inmerso, por más que insista en su inocencia ante el inspector de aduanas Frank Dixon (Stanley Tucci). A Viktor no le queda otra que resignarse a su situación de tránsito, pero acabará convirtiéndose en un personaje imprescindible en al aeropuerto: se hará amigo de todos, aconsejará a la guapa azafata Amelia (Catherine Zeta-Jones), apoyará a varios inmigrantes trabajadores de la terminal e incluso se enamorará.
Quizá la duración resulte excesiva y el desenlace menos convincente de lo esperado. Pero el chispeante guion beneficiado de la pericia de Andrew Niccol (“El show de Truman”, 1998), el brillante diseño de producción, un reparto de lujo con secundarios de diferentes nacionalidades como Diego Luna, Kumar Pallana, Zoe Saldana, Valeri Nikolayev o Rini Bell, y los temas de fondo de la mayor parte del metraje: la importancia de la familia, la nostalgia del padre, la tenacidad ante las adversidades o el respeto a la dignidad de todas las personas, hacen de “La terminal” una cinta recomendable y optimista con regustos clásicos.
Juan Jesús de Cózar