En las fechas próximas a la boda es costumbre que los novios hagan ofrenda de huevos a las monjas franciscanas para que recen a Santa Clara de Asís y el día del enlace haya buen tiempo y luzca el sol
Así sucede en España desde la Edad Media aunque se desconoce el auténtico origen de esta tradición. Ni en la biografía ni en la leyenda de Santa Clara está recogido ningún hecho que pueda decirse que haya dado pie a que casi ocho siglos después de su muerte, en concreto 765 años, los novios hagan una ofrenda de huevos a la santa para que su casamiento no se vea sorprendido por la lluvia.
Es muy curioso que Santa Clara sea más conocida popularmente por ser patrona del buen tiempo, que por ser la primera mujer que fundó una orden religiosa, la de Clarisas o Damas Pobres bajo la regla y estatutos de San Francisco de Asís, y la primera mujer que creó una regla monástica en la Edad Media, aprobada por el Papa Inocencio IV solo dos días antes de su muerte en 1253. En 1958 el Papa Pío XII la declaró patrona de la televisión y de las telecomunicaciones.
En toda España se ofrendan huevos a Santa Clara en los monasterios de su orden
Aunque hay peculiaridades según la región. En algunas zonas los huevos los lleva alguna amiga de la novia, en otras los contrayentes. Hay sitios en que es la misma semana de la boda, y en otros quince días antes. Parejas que regalan desde dos hasta cinco docenas y otras solo una. Y hasta hay docenas que incluyen trece huevos…
En Sevilla, tradicionalmente, las ofrendas de huevos para el buen tiempo en las bodas se hacían en el monasterio de Santa Clara, el segundo más antiguo de la ciudad, fundado poco después de la conquista por San Fernando, y el más antiguo de las clarisas sevillanas, aunque también en Santa Inés, fundado en 1374 por la ilustre dama Doña María Coronel. Cuando Santa Clara se cerró en 1996, a Santa Inés se unió el tercer convento de clarisas de la capital, el de Santa María de Jesús, cuya fundación es de 1520, donde fueron acogidas las ancianas monjas del desaparecido convento de Santa Clara.
Las clarisas rezan también para que sean felices los novios
La madre abadesa de Santa Inés, Sor María Rebeca, confirma que los novios siguen haciendo ofrenda de huevos al monasterio para que recen por la ausencia de lluvia. En tiempos de sequía las religiosas solo rezan para que no se moje la novia. A veces llevan también donativos, aunque sobre todo llevan huevos. Por su parte, especifica la madre abadesa del monasterio de Santa María de Jesús que sobre todo tienen mucha demanda de rezos y regalo de huevos cuando hay mal tiempo. Las clarisas rezan también para que sean felices los novios. Y no solo reciben huevos para las bodas. También se solicita el buen tiempo para bautizos y primeras comuniones.
En el monasterio de Santa Clara de Estepa, las peticiones de rezos para el buen tiempo en las bodas se popularizaron después del enlace de Eugenia Martínez de Irujo con el torero Francisco Rivera en 1998. Y no solo acuden novios de Estepa, sino de localidades de alrededor como Herrera, Pedrera, Casariche, Gilena, Badolatosa, El Rubio, Aguadulces y Marinaleda e incluso más lejanas como Osuna y el pueblo cordobés de Puente Genil. Comenta Sor Ángela, la priora, que los novios suelen dejar en el torno unos canastitos muy bien preparados con tarjetas con sus datos. En ocasiones reciben cartas muy emotivas. Las clarisas del Cerro de San Cristóbal de Estepa no solo rezan por el tiempo de la boda sino por la fidelidad, entrega y felicidad de los novios y aprovechan para hacer apostolado rogándoles que Dios siempre esté presente en sus vidas.
GLORIA GAMITO
