Lectura del santo evangelio según Mc (16, 15-18 )
Y les dijo: «Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación. El que crea y sea bautizado se salvará; el que no crea será condenado. A los que crean, les acompañarán estos signos: echarán demonios en mi nombre, hablarán lenguas nuevas, cogerán serpientes en sus manos y, si beben un veneno mortal, no les hará daño. Impondrán las manos a los enfermos, y quedarán sanos».
Comentario
Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación
No se trata, en ningún momento, de proselitismo, la Iglesia no es una secta que hace adeptos para crecer en número de miembros. La Iglesia anuncia el Evangelio, anuncia a Jesucristo, anuncia la Buena Noticia de Dios para los hombres, que Dios es Padre y ama a todos. No se trata de captar gente, sólo de ayudar a todos a descubrir su dignidad y el amor misericordioso de Dios en cualquier situación que se encuentren.
Y es tarea de todos, puesto que lo más importante es dar testimonio de la fe, del encuentro personal con Cristo que cambia la vida y la llena de sentido. No se trata de ir dando clases de teología, no hace falta ser un pastoralista, lo único imprescindible es tener experiencia de encuentro con el Señor para salir a comunicar a todos lo que uno vive, siente, cree y espera.
A los que creen les acompañan unos signos: «echaran demonios, hablarán lenguas….». Porque quien cree, confía; quien confía, ama y quien ama vive de una manera especial que ahuyenta los demonios del miedo, la desconfianza, la tristeza, la violencia…,. Quien ama habla un lenguaje universal que entiende a todos, acoge a todos y tiende puentes como canal de comunicación y encuentro. Y no le hace daño el veneno del rencor porque perdona, ni el veneno del egoísmo porque no vive para sí, sino para los demás.
Jesucristo nos envía a todos para que el mensaje del Evangelio alcance a toda la creación. No pongamos excusas ni nos escudemos en nada, ya que cuenta con nosotros dispongámonos a encontrarnos con Él, para que muchos se puedan encontrarlo por nuestro medio.
